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Mientras que la Semana Santa relataba los últimos días de Jesús entre los hombres, su lucha, su última cena y el Vía Crucis antes de resucitar el Domingo de Resurrección, la Ascensión marca la subida de Cristo al cielo 40 días después. ¿Cuál es el significado de la Ascensión, y qué hay de la fiesta de Pentecostés? Veamos qué hace de estas dos fiestas dos momentos fundamentales y esenciales de la religión católica.
La ascensión, cuando Jesús se une a Dios en el cielo
El jueves de la Ascensión, 40 días después de la resurrección de Jesús, marca el final de la presencia de Jesús en la tierra y por lo tanto, en consecuencia, el final de las apariciones de Jesús a sus discípulos.
La ascensión proviene del latín ""ascensio"" que significa ""subir"", celebración significativa y simbólica que relata el momento en que Jesús ascendió al cielo.
A partir de ese día, en efecto, Cristo volvió al lado de Dios, su padre, en el cielo. Es decir, que el cielo, aquí, representa más un lugar de felicidad, paz y plenitud que el cielo como lo conocemos en la tierra.
La elevación de Jesús al cielo se convirtió así en el símbolo de la nueva inmortalidad de Cristo.
Esta fecha también marca una cierta renovación. El comienzo de una era sin la presencia física de Jesús, el comienzo de la fe como la conocemos hoy.
Ahora debemos ser capaces de creer en lo dicho y vivido por los discípulos que son prueba y testigos de la presencia de Jesús en la tierra.
Pero la partida de Cristo al cielo no significa el fin de sus acciones para los hombres, deja en buenas manos a sus discípulos ya que les promete la llegada de una fuerza, la venida del Espíritu Santo. Una última mano se tendió hacia los hombres antes de su elevación.
La venida del Espíritu Santo a los discípulos se llama así Pentecostés.
Habréis entendido: la Pascua, la ascensión pero también Pentecostés son tres fiestas íntimamente ligadas. Están asociados con el último viaje de Jesús a la inmortalidad y el nacimiento de la religión católica.
Pentecostés
Pentecostés simboliza así el día en que los apóstoles recibieron el Espíritu Santo anunciado por Jesús.
Fue a partir de este momento que los apóstoles de Cristo comenzaron a dar testimonio de los hechos y enseñanzas de Jesús al resto del mundo y es así como se formaron las comunidades cristianas.
Pentecostés es hoy la ocasión para celebrar el Espíritu Santo y la aparición de la Iglesia.
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