El Reloj del Ángel de la Guarda

El libro titulado "El Reloj del Ángel de la Guarda" fue dedicado por el Padre Drexel a todos los jóvenes de la Hermandad de la Santísima Virgen María, en la Alta Alemania, el día de San Miguel del año 1621; pero esta dedicación está precedida por otra que el autor dirige a su Ángel de la Guarda. Después de esta primera dedicatoria, el Padre Drexel colocó la respuesta del Ángel, en la que se exponen los principios de su libro. Le había pedido a su Ángel de la Guarda que le enseñara a rezar, a vivir y a morir. El Ángel respondió que "es más bien en orden inverso que la instrucción debe ser dada. Quiero enseñarte primero a morir, luego a vivir, luego a rezar. Sería ridículo desear una buena muerte y vivir mal; y nunca sabrá rezar bien quien no se haya sacudido ya del yugo del vicio".

Para cada hora del día y de la noche: Una enseñanza para aprender a morir, para aprender a vivir. Cada hora termina con una oración para aprender a rezar.