Este brazalete de aspecto sencillo es sin embargo una verdadera joya llena de maravillas. Hecho a mano, se mezcla para deleitar con trajes cálidos, claros u oscuros, llevando el naranja natural del ágata de fuego a tu muñeca. Las pocas cuentas de plata y el amuleto en forma de una pequeña cruz cuadrada. Las otras perlas aportan contraste al conjunto gracias a la madera teñida de negro que resalta las ágatas.
El ágata de fuego es una piedra de salud reconocida en la litoterapia como una ayuda para anclar, manejar y canalizar su energía interna. Disipa los temores y crea una sensación de seguridad, ayudando a quienes carecen de confianza en sí mismos a hablar y expresarse.
Cuentas: 10 mm
El tamaño elástico de los adultos
Esta joya es de fabricación monástica, de las Paternidades de Jerusalén.
- Peso
- 10 gr